Lo que debes saber sobre la vacuna contra el sarampión
- Dra. Hanna Rigamonti
- 13 nov
- 2 Min. de lectura
El sarampión es mucho más que un simple sarpullido: se trata de una enfermedad viral aguda y altamente contagiosa causada por el virus del sarampión. A pesar de que muchas personas piensan que está erradicada, los brotes siguen ocurriendo cuando las tasas de vacunación disminuyen.
A continuación te compartimos información sobre esta condición y todo lo que debes saber sobre la vacuna contra el sarampión:
¿Cómo se transmite el sarampión?
El virus se propaga fácilmente a través de gotitas respiratorias al toser o estornudar, e incluso puede permanecer en el aire por varias horas. Su nivel de contagio es tan alto que más del 90% de las personas no vacunadas se infectan tras estar expuestas.
Síntomas característicos
El sarampión suele comenzar con fiebre alta, malestar general y las tres “C”: tos, congestión nasal (rinorrea) y conjuntivitis.
A veces aparecen las manchas de Koplik, pequeñas lesiones blanco-azuladas en el interior de la boca, que son una señal típica de la enfermedad.
Entre 2 y 4 días después, se desarrolla la erupción cutánea, que inicia en el rostro y luego se extiende al resto del cuerpo. Las personas son contagiosas desde cuatro días antes hasta cuatro días después de que surge la erupción.
Complicaciones posibles
El sarampión puede tener consecuencias graves. Entre las más comunes están la otitis media, neumonía, diarrea y encefalitis (inflamación del cerebro). Además, el virus debilita el sistema inmunológico, lo que aumenta el riesgo de otras infecciones durante semanas o incluso meses.Los grupos con mayor riesgo de complicaciones son los niños pequeños, adultos mayores de 20 años, mujeres embarazadas y personas inmunodeprimidas.
La mejor defensa: la vacuna contra el sarampión (MMR)
La vacuna viva atenuada contra el sarampión, conocida como MMR (por sus siglas en inglés: Measles, Mumps, Rubella), ofrece una protección segura y eficaz.Se administra en dos dosis:
Primera dosis: a los 12 meses de edad
Segunda dosis: a los 4 años
Esta vacuna no solo protege contra el sarampión, sino también contra las paperas y la rubéola, tres enfermedades que pueden tener consecuencias severas si no se previenen.
En resumen
El sarampión puede parecer una enfermedad del pasado, pero sigue siendo una amenaza real cuando las comunidades bajan la guardia. La vacunación con la MMR es la herramienta más poderosa para mantenernos protegidos y evitar brotes.
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